Señores de la guerra, señores Bush, Blair, Aznar, Rajoy, la humanidad tiene motivos para estarles agradecidos:
El número de personas que ha muerto víctima de actos de “terrorismo” en todo el mundo aumentó en un 40 por ciento, a más de 20.000 el año pasado, principalmente debido a la violencia en Irak, reveló el lunes un informe estadounidense.
Érase una vez un grupo de iluminados que capitaneados por Bush (ver: “Los hijos de Satanás: los 'mentirosos innobles', una banda de locos en Washington”) decidieron invadir Irak “para luchar contra el terrorismo”, terrorismo que no exitía en dicho país y que hoy ha convertido a Irak en su principal campo de operaciones y entrenamiento. Han convertido Irak en la sucursal terrorista de Afganistán. Si antes había un problema, ahora hay dos.
Decidieron combatir el terrorismo donde no lo había y decidieron hacerlo a la “israelí”: primero se bombardea y después, si apetece, se pregunta. Nada les importaban las vidas de los iraquíes ni de los soldados que mandaban a la guerra.
Lo hicieron en contra de la ONU y las advertencias de que esa invasión sólo empeoraría las cosas. Los locos hispanos, Aznar y su gobierno, con Rajoy de vicepresidente, lo hicieron para “sacar a España del rincón de la Historia”.
Suponíamos los ciudadanos de a pie que el verdadero interés estaba en las reservas petrolíferas de Irak. Antes lo suponíamos, ahora lo sabemos con toda seguridad: El Centro Internacional de Energía (ICE, según sus siglas en inglés), con sede en Londres, afirma que Irak posee la segunda reserva de petróleo del mundo, con 112.000 milliones de barriles.
Fue en los primeros días de la invasión de Irak cuando oímos decir a la penosa ex responsable del ministerio de exteriores, Ana del Palacio, eso de “en el desarrollo de la guerra contra Irak hay algunos indicadores que son relevantes. Las bolsas han subido y el petróleo ha bajado. Ya los ciudadanos pagan unos céntimos menos por la gasolina y el gasóleo. Eso son datos”... ¿Se puede ser más indigno?
Sí: los días 11, 12 y 13 de marzo de 2004 demostraron que podían ser infinitamente más indignos e indecentes.
Rajoy no debe salir indemne y debe ser considerado responsable al mismo nivel que Aznar y cía de las decisiones que tomó su gobierno. Es de suponer que Rajoy, que define la Alianza de Civilizaciones propuesta por Zapatero es “ignorancia astronómica, irresponsabilidad manifiesta o necedad supina”, prefiere, como Aznar, la guerra a las palabras.
Para sacarnos del rincón de la historia nos metieron a todos en el túnel de las tinieblas. Hoy el terrorismo yihadista es mucho más peligroso que ayer en todo el mundo.
Tenemos motivos para estar agradecidos a los señores de la guerra
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