sábado, junio 16, 2007

30 años

La verdad, no puedo decir que para mí el año 1977 fuese el mejor de mi vida. Se produjo un gran cambio en ella que no me era posible controlar... debido a mi corta edad. En fin, recuerdo los años anteriores a ese 1977 con mucha nostalgia y con mucho cariño para la ciudad en la que viví, Barcelona.

Esto es una breve introducción para situarme a mí mismo en dicho contexto, pero sobre todo quería dedicar esta entrada a Juan María Bandrés, senador desde 1977 y diputado de 1979 a 1989 y que desde hace años se encuentra convaleciente después de subrir un infarto cerebral. Es un político que siempre ha contado con mi admiración y simpatía. Sea por tanto para él este pequeño homenaje y recuerdo que le hago desde este blog.

12 comentarios:

Gracchus Babeuf dijo...

Te honra tu recuerdo. Bandrés es el gran olvidado de tanta conmemoración. Porque no votó la Constitución, representando él buena parte de sus mejores valores. Por sacar de la cárcel a mi hermano, por un absurdo delito de opinión. Por su lucha por la desaparición del terrorismo, y la integración de ETA pm,por...

Anónimo dijo...

Para mi siempre ha sido un referente. También creo que es el gran olvidado.

Un abrazo a Jose Mari.

AF dijo...

Sí señor, don Felipe, hace usted justicia. Bandrés ha sido olvidado incluso por aquellos políticos que tanta gala hacen de ese cierto corporativismo que les impulsa a considerarse los más altos y los más guapos.

Son muy frecuentes las fotos de familia entre aquellos que participaron en el proceso constituyente de la segunda mitad de los años setenta. Bandrés fue una persona, un militante, un abogado y un político profesional muy significado en su momento.

Un saludo.

Blanca dijo...

Siempre tan oportuno, justo y necesario, Felipe.

Lástima que ahora tampoco haya en el mundo de la izquierda vasca una persona como Bandrés, auténtico hombre bueno, honrado, coherente y necesario en una época tan falta de políticos de altura.

Fue un referente en su día, figura clave en la desaparición de ETA poli-mili junto con Onaindía.

Por eso deben quedar siempre puertas abiertas, para que puedan entrar los que lo deseen y a quienes se pueda convencer de que la mejor manera de solucionar conflictos siempre es la palabra y la negociación.

Tambien a ellos les echamos de menos en estos momentos...

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Felipe.G dijo...

Lo siento, "cualquier concejal de euskadi", pero tu comentario no venía a cuento aquí. En cualquier otra entrada lo habría dejado, pero quiero que ésta está libre de cualquier tipo de salida de tono gratuita.

Felipe.G dijo...

Juan María Bandrés merece nuestro recuerdo y afecto. A mí me pareció honesto y coherente como persona y como político. La vida no ha sido justa con él.

Haría falta alguien como él en la política nacional y vasca

Anónimo dijo...

¿Le hubiera gustado a Bandrés la censura que practicas en tu blog?

Anónimo dijo...

Si esto es un blog solo para los que piensan como tu, lo dices y me voy a expresarme a otro sitio. Si lo que pasa es que quieres cerrar los ojos a la situación actual en euskadi lo entiendo.

Felipe.G dijo...

Estimado usuario, a mí no me marca la agenda de lo que tengo que decir ni el PP ni nadie. Si a usted sí es su problema. En esta entrada he querido rendir homenaje a un hombre que me parece bueno y justo y me gustaría que los comentarios se ajustaran a ese homenaje.

Blanca dijo...

Concejal... me da la sensación de que la realidad de Euskadi es algo diferente a lo que Vd. plantea y desde luego, personas lúcidas, generosas y políticamente óptimas, como Bandrés, es lo que haría falta en la izquierda abertzale de hoy.

Respete a los que queremos homenajear a un hombre que se merece cualquier cosa menos una crítica acerba.

Delfi_r dijo...

Yo era un adolescente ese 1977, pero Bandrés quedará en mi memoria como un hombre digno que merece éste y aún mayores homenajes.